Bueno, aquí tengo que hacer varias anotaciones.
En primer lugar esta receta es un homenaje a mi familia (es obvio que son todos asturianos), claro está que ya empezarán a decir que si esto sobra o aquello falta, pero que quede claro que es la versión que yo recuerdo de mis veranos en el pueblo y asesorada por mi madre (asturiana donde las haya).
En segundo lugar, los que estén a dieta que cierren inmediatamente la página, esto es una bomba de calorías, yo aviso. Eso si, os vais a perder un plato exquisito de sabor inolvidable.
También decir que el compango (la carne) se suele poner a parte, se sirve primero el caldo de berzas y después la carne. Yo he optado por ponerlo todo junto, va en cuentión de gustos.
Ingredientes para 6 personas:
250 gr. de costillas secas.
250 gr. de lacón salado.
150 gr. de panceta salada.
150 gr. de huesos de jamón.
500 gr. de judías blancas (yo he utilizado en esta ocasión judiones de la granja).
2 chorizos asturianos.
2 morcillas asturianas.
1 cebolleta.
750 gr. de patatas.
50 gr. de unto.
1 kg. de berzas.
sal.
agua.
250 gr. de costillas secas.
250 gr. de lacón salado.
150 gr. de panceta salada.
150 gr. de huesos de jamón.
500 gr. de judías blancas (yo he utilizado en esta ocasión judiones de la granja).
2 chorizos asturianos.
2 morcillas asturianas.
1 cebolleta.
750 gr. de patatas.
50 gr. de unto.
1 kg. de berzas.
sal.
agua.
Ponemos en remojo el día anterior en agua fría las judías y la carne.
Escurrimos las judías y las ponemos a cocer en agua fría con la cebolleta picada.
Cuando las judías empiecen a flotar las asustamos con un vaso de agua fría y añadimos el unto, las costillas y el lacón salado. El unto son esos trocitos blancos que veis, es la grasa blanca que cubre el intestino delgado de cerdo. Lo podeis pedir en las charcuterías, suelen tener o lo pueden encargar. Da un sabor estupendo a los potes y pucheros, sin unto no existe el pote, con lo cual no lo elimineis de la receta porque pierde todo su sentido.
Dejamos cocer destapado una hora a fuego fuerte (en vitro del 6 al 5).
No os puedo decir exactamente tiempos porque depende de la dureza de la judía. Vamos probando y así acertamos. Mordemos una judía, si ofrece poca resistencia, es decir, está casi hecha añadimos el chorizo, la morcilla y la panceta. Si vemos que están duras dejamos cocer otra media hora más.
Vamos viendo también cómo va de agua y añadimos si vemos que baja mucho.
Cuando pongamos el chorizo y demás dejamos cocer 30 minutos y añadimos las patatas cortadas en dados pequeños. Esperamos 10 minutos.
Lavamos las berzas y las cortamos en juliana. Las añadimos al pote. Parecerá que no quieren entrar, pero entran todas, según cogen calor pierden volumen. Cocemos 10 minutos y .... listo.
Sólo nos queda emplatar. Ya os digo que podeis poner por una parte la carne y por otra el caldo, como si fuese un cocido normal.
Sabor exquisito. Plato contundente.
Vaso de vino, hogaza de pan y siesta.
Buen provecho.
Vaso de vino, hogaza de pan y siesta.
Buen provecho.
7 comentarios:
Como nos hemos puesto Paloma...
¡Puxa Asturies!
Pero que cosa más rica!!!Menuda pinta!!Un plato delicioso para combatir este frio!!!
Pues la próxima un botillo del Bierzo, y que lloren los dietistas.
Madre mía yo me apunto a la bomba calórica eso es buenísimo una cucharadita porfi...bocado de dioses.Tomo nota.
Delicioso!!! me encantan los potajes y este tiene una pinta tremenda!! a parte de ser un precioso homenaje! besoss
Me encantan los platos de cuchara, todos esos potajes y cocidos, hay que tener cuidado pero de vez en cuando.....,
K rico plato y qué contundente...me le apunto para en cuanto venga el frío, este año nos está engañando el clima, pedazo judiones!!.
Besos
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